Detectores de CO2

Qué es un detector de CO2

Un detector de CO2 es un instrumento que se utiliza un sensor para la medición de gas de dióxido de carbono en un ambiente determinado. Con la utilización de éste tipo de sensores de CO2, se pueden identificar las zonas o estancias habitadas en las que los niveles de dióxido de carbono son superiores a los aceptables.

Por supuesto, su capacidad de detección se limita a espacios y condiciones determinadas.

En lo que se refiere a la unidad de medida, lo más común es que los sensores detecten los niveles de CO2 en partes por millón (ppm).

Los fabricantes suelen usar los infrarrojos NDIR para el funcionamiento de éstos detectores, si bien, el dióxido de carbono absorbe la radiación del infrarrojo del sensor. El detector de CO2, por su parte, cuenta con un emisor y un receptor que son los encargados de medir la cantidad de CO2 mediante un haz. Este haz, muestra las diferencias entre los niveles recibidos y emitidos por el infrarrojo del sensor.

Niveles normales de dióxido de carbono en el ambiente

Como se ha comentado anteriormente y para tener una referencia de medición de C02, el valor máximo recomendado para los interiores oscila entre las 1.000 y las 1.500 ppm (partes por millón).

• Habitual en exteriores: 350 a 450 ppm.
• Aceptable en interiores: 600 a 800 ppm.
• Tolerable en interiores: 1.000 ppm.

Tipos de detectores de CO2

Existen muchos tipos de detectores de dióxido de carbono en el mercado, pero los más utilizados son los sensores portátiles infrarrojos con baterías recargables, son más modernos y actuales.

Los precios de cada uno de ellos, van en función de su capacidad de detección y también de sus cualidades. Los hay que pueden funcionar con WIFI.

Cuando es importante instalar un detector de CO2

Como ya se sabe, los altos niveles de dióxido de carbono pueden traer graves consecuencias para la salud.

Por esta razón, es recomendable hacer la medición de CO2 en todos los lugares que están habitados, más aún, si hay adultos mayores y/o niños.

Las construcciones actuales suelen caracterizarse, entre otras cosas, por su aislamiento. Esto hace que cada vez sean más herméticas, por lo tanto, el aire y la ventilación dentro de ellas, son elementos que deberían estar constantemente vigilados. Por ello, es fundamental instalar los sensores de CO2 en espacios donde haya un flujo alto de personas.

Dónde instalar los detectores CO2

Antes de nada, es conveniente no tomarse la instalación de los sensores de CO2 a la ligera y hacer un estudio previo de la estancia o zona para conocer el tamaño, la forma, las entradas de aire, el flujo de ventilación, etc.

Además, es importante constatar si existen espacios con potenciales fugas. En caso de que se sospeche de una parte de la estancia con altos niveles de CO2, entonces ese será el lugar para instalar el medidor.

Otro punto importante es evitar poner el detector de dióxido de carbono en un lugar con obstrucciones, pues eso podría impedir el correcto análisis de estos gases.

Consejos para su ubicación

• No debe introducirse en compartimentos cerrados como cajones, armarios o estanterías, ya que, ese ambiente tan cargado de  podría afectar a posteriores mediciones.
• No colocar demasiado cerca de puertas o ventanas, ya que, la medición de la estancia en cuestión no se ajustaría a la realidad.
• Es aconsejable colocarlo en un punto céntrico y estratégico de la casa, donde confluyan varios ambientes de la casa.
• Lo ideal es que el sitio donde se ubique, tenga una temperatura que no baje de -10°C y no sobrepase los 40°C.
• Debe estar colocado en un sitio seco, y nunca sobre una superficie húmeda o mojada.
• Tiene que estar en un sitio limpio y despejado, ya que, de lo contrario, la suciedad podría afectar al funcionamiento del aparato.

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